Para muchos una alegría, para otros una tristeza y para la mayoría una sorpresa, pero independientemente la emoción que causó en usted, lo cierto es que el Puntarenas FC ganó 2 goles a uno el pasado domingo 24 de octubre al Deportivo Saprissa en el estadio Ricardo Saprissa.
Bajo un torrencial aguacero, poca asistencia del público y las bellas bailarinas de Rumba que desconcentraban a más de uno en el estadio, arrancó el juego a las 6:00 p.m.
En los primeros 15 minutos del juego, Puntarenas no se despertaba a pesar de la imposición que mostraba el Deportivo Saprissa, aunque en muchas ocasiones fueron jugadas en vano, por un descuido del equipo del pacífico puedo haber llegado la anotación.
Pero los papeles cambiarían, esta vez el juego a favor de los puntarenenses, primero una anotación conseguida por Helliut al minuto 24 del primer tiempo y otra por Mario Víquez al minuto 31 de la segunda etapa.
Tras la desesperación que mostraban los jugadores, e inclusive el cuerpo técnico de cada equipo, parecía que el nerviosismo invadió hasta el árbitro, el cual cometió varios errores en menos de dos minutos, el no pitar un penal para cada equipo.
La tensión se hacía presente conforme avanzaba el encuentro, entre goles, expulsiones, reclamos, preocupación, alegrías y tristezas, así iba concluyendo el juego.
La última acción sería concretada por Jairo Arrieta, el delantero del Saprissa, tras obtener una anotación desde el área de penal al minuto 49, de esta manera finaliza el partido.
El puerto jugó, se podría decir, que el mejor partido de la temporada, ante un Saprissa que se veía confundido y con un deplorable rendimiento.
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